Los síntomas del TDAH | Centro Cadis
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TDAH: síntomas, diagnóstico y tratamiento

El TDAH puede tener efectos significativos a lo largo de la vida. En la infancia, puede afectar el rendimiento académico y las relaciones con compañeros y maestros. En la adolescencia, puede incrementar el riesgo de problemas de comportamiento, abuso de sustancias y dificultades académicas. En la adultez, el TDAH no tratado puede llevar a problemas en el trabajo, dificultades en las relaciones y una baja autoestima. Sin embargo, con el tratamiento adecuado, muchas personas con TDAH pueden llevar vidas exitosas y satisfactorias. Te mostramos cómo detectar el TDAH y sus síntomas, la clave para un buen tratamiento es diagnosticarlo y actuar cuanto antes.

¿El TDAH afecta a tu vida cotidiana?

El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es una condición neurobiológica que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se caracteriza principalmente por síntomas de inatención, hiperactividad e impulsividad, que pueden interferir significativamente en la vida diaria de quienes lo padecen. Aunque el TDAH es más comúnmente diagnosticado en niños, también puede persistir en la adolescencia y la adultez, con efectos a largo plazo en la vida profesional, académica y personal.

La causa exacta del TDAH aún no se conoce, pero se cree que es el resultado de una combinación de factores genéticos, ambientales y neurobiológicos. Los estudios sugieren que:

  1. Genética: Existe una fuerte predisposición genética, con aproximadamente el 75% de los casos de TDAH heredados de uno de los padres.
  2. Neurobiología: Las investigaciones de neuroimagen han mostrado diferencias en las estructuras cerebrales y en la actividad de los neurotransmisores, especialmente la dopamina y la norepinefrina, en personas con TDAH.
  3. Factores ambientales: Exposición prenatal al tabaco, alcohol y drogas, nacimiento prematuro y bajo peso al nacer, y exposición a toxinas ambientales como el plomo pueden aumentar el riesgo de desarrollar TDAH.

¿Dificultad para concentrarte, impulsividad o hiperactividad? Podría ser TDAH

Los síntomas del TDAH se dividen en dos categorías principales: inatención e hiperactividad/impulsividad. Es importante destacar que no todos los individuos con TDAH presentan ambos tipos de síntomas; algunos pueden ser predominantemente inatentos, mientras que otros pueden ser predominantemente hiperactivos e impulsivos.

Inatención

  1. Dificultad para mantener la atención: Las personas con TDAH a menudo tienen problemas para concentrarse en tareas o actividades, especialmente aquellas que requieren un esfuerzo mental sostenido. Se distraen fácilmente por estímulos irrelevantes.
  2. Errores por descuido: Suelen cometer errores en los trabajos escolares o en las tareas de su puesto de trabajo debido a la falta de atención a los detalles. Suelen ser olvidadizos con las tareas y actividades diarias.
  3. Dificultad para escuchar: Parece que no escuchan cuando se les habla directamente, incluso en ausencia de distracciones obvias.
  4. Dificultad para seguir instrucciones: Tienen problemas para completar tareas o deberes, a menudo dejando cosas sin terminar.
  5. Desorganización: Frecuentemente tienen dificultades para organizar tareas y actividades, resultando en trabajos desordenados y mal gestionados.
  6. Evita tareas que requieren esfuerzo mental prolongado: Pueden evitar, desagradarles o mostrar una renuencia marcada a participar en tareas que requieren esfuerzo mental sostenido.
  7. Pierde objetos comúnmente: Extravía todo tipo de objetos, como materiales escolares, llaves, documentos y herramientas.

Hiperactividad e Impulsividad

  1. Inquietud física: Los niños con TDAH pueden moverse constantemente, por ejemplo un movimiento continuo de la pierna, mientras que los adultos pueden sentirse inquietos. Actúan como si «tuvieran un motor» y no pueden estar quietos.
  2. Incapacidad para permanecer sentado: A menudo se levantan en situaciones en las que se espera que permanezcan sentados. Como en clase o en el trabajo.
  3. Correr inapropiadamente: En los niños, esto puede manifestarse como correr en situaciones inapropiadas. En los adolescentes y adultos, puede presentarse como una sensación de inquietud.
  4. Dificultad para jugar tranquilamente: No pueden jugar o participar en actividades de ocio de forma tranquila.
  5. Hablar excesivamente: Pueden hablar en exceso y sin descanso.
  6. Responder impulsivamente: Responden preguntas antes de que se hayan completado, o interrumpen o se inmiscuyen en conversaciones, juegos o actividades de otros.
  7. Dificultad para esperar su turno: Les cuesta esperar su turno en situaciones de espera.

Es normal un despiste de vez en cuando, pero si observas que muchos de estos síntomas se repiten, es posible que tu hijo pueda tener TDAH.

Evita la depresión y la ansiedad con una detección a tiempo

Un diagnóstico y tratamiento tempranos pueden prevenir complicaciones a largo plazo, como problemas académicos, dificultades en las relaciones y baja autoestima. La intervención temprana también puede reducir el riesgo de desarrollar problemas de salud mental adicionales, como la ansiedad y la depresión.

El manejo temprano y adecuado del TDAH puede mejorar significativamente el pronóstico a largo plazo. Los pacientes que reciben un tratamiento adecuado desde una edad temprana tienen más probabilidades de alcanzar su máximo potencial académico, profesional y personal.

Es importante, si sospechas o detectas alguno de los síntomas, que visites un centro especializado, allí psicólogos especialistas te ayudarán a efectuar un diagnóstico y a comenzar el tratamiento cuanto antes.

Los centros especializados pueden ofrecer planes de tratamiento personalizados que combinan:

  1. Intervenciones farmacológicas: Ajuste y monitoreo de la medicación para asegurar la máxima efectividad y minimizar los efectos secundarios.
  2. Terapias conductuales y cognitivo-conductuales: Estrategias para manejar los síntomas del TDAH y desarrollar habilidades de afrontamiento efectivas.
  3. Programas de entrenamiento para padres: Ayudan a los padres a entender el TDAH y proporcionar el apoyo necesario en el hogar.
  4. Grupos de apoyo: Proporcionan un espacio para compartir experiencias y estrategias con otras personas que enfrentan desafíos similares.
  5. Educación y capacitación: Ofrecen talleres y programas educativos para pacientes y familias, mejorando la comprensión del TDAH y las estrategias de manejo.

Hay que recordar que cada paciente con TDAH es único, presentando un perfil de síntomas y necesidades que varía considerablemente de una persona a otra. Debido a esta diversidad, el tratamiento del TDAH debe ser personalizado y adaptado a las características específicas de cada individuo. Mientras que algunos pacientes pueden beneficiarse principalmente de intervenciones farmacológicas, otros pueden requerir enfoques más centrados en la terapia conductual, ajustes educativos, o una combinación de diversas estrategias. Un plan de tratamiento eficaz debe ser flexible y evolucionar en respuesta a los cambios en los síntomas y circunstancias del paciente.

Si buscas más información sobre el TDAH o deseas realizar una consulta para evaluar y tratar esta condición, no dudes en ponerte en contacto con nuestro centro especializado. En Centro Cadis, nuestro equipo de profesionales está comprometido a proporcionar un diagnóstico preciso y un tratamiento personalizado, adaptado a las necesidades específicas de cada paciente. ¡Llámanos o visítanos!